jueves, diciembre 21, 2006

Lago Verde: La posada del León


Si seguimos el camino de comercio de la gran región del Lago Verde podemos encontrar decenas de posadas, unas más grandes que otras, de mejor servicio o atención, pero si hemos de mencionar una única posada del camino de comercio, quizá la más importante, deberíamos referirnos a la Posada del León.

La posada del León se encuentra justo en la bifurcación entre el condado del Arenal y el condado de Verdemar, con lo que suele estar frecuentada básicamente por gentes de esas dos pequeñas regiones, la mayoría comerciantes que están de paso, aunque ocasionalmente pueden verse miembros del ejercito, la guardia e incluso rufianes de todo tipo, incluídos aventureros.

Pero la posada no es sólo frecuentada por estar en un importante punto de encuentro en el camino de comercio, no. La posada fue construída por un elfo azul, una rama de elfos poco ortodoxa de la cual hablaré en otra ocasión, basta decir que son los mejores asesinos a sueldo que se pueden contratar. Se dice que Shal'do, como se llama el elfo, huyendo de su pueblo cansado y herido, se puso a reposar sobre una gran piedra verdusca donde ahora mismo está la posada. En ese momento, se le apareció un león, que según Shal'do tenía un aura fantasmal, y se le lanzó sobre él. Con las pocas fuerzas que le quedaban, repelió al león fantasmal y éste desapareció. Shal'do cuenta entre risas y voceríos, que en ese momento tuvo la inspiración de montar una posada en ese lugar, y con tiempo y esfuerzo lo hizo.

Pero no sólo es frecuentada por tener un extraño dueño con una curiosa historia que contar, también su cocina es espectacular, teniendo platos de todo el Lago verde y más allá. Y si la cocina no basta parar mover a un hombre, los deseos de aventura también ayudan. La piedra que encontró Shal'do no era más que la punta del iceberg. La piedra era un trozo de una gran construcción que yació ahí hace más de mil años, se dice que perteneció a los primeros magos, los místicos magi. Shal'do al construir la posada encontró una pequeña entrada al interior de las ruínas, pero temeroso de los fantasmas, como el del león, la selló.

Sea como sea, todo aventurero con ansias de conocimiento o fortuna prueba suerte en la posada del León para poder entrar en esas misteriosas, y muy probablemente peligrosas ruínas. Sin embargo, muchos dicen que no es más que una invención del pícaro elfo azul para atraer a más clientes a su, como definirían muchos amantes de la cerveza, antro estrambótico.

martes, diciembre 12, 2006

Historias del pasado (2)


Tal como dije anteriormente, sigo estudiando estás ruínas, y en ellas hay escritas una historia, de forma narrativa, que me dispongo a transcribir a mi diario...

Magia
Episodio 1: El nacimiento

El eco de un llanto infantil rebotaba en las paredes del barrio lacan de Etermagi. La matrona se afanaba en ayudar al infante a nacer, mientras el padre observaba ansioso y nervioso como una nueva vida nacía. Una nueva vida que agotaba las pocas y frágiles fuerzas de la progenitora. La madre haciendo uso del poco tiempo de vida que le quedaba, observó a su recien nacido y con una sonrisa expiró, pues pudo contemplar antes de su muerte, que su hija abandonaría una vida de servidumbre, una vida destinada a cumplir todos los deseos de los magos, la vida de los lacan.

La matrona observó al recien nacido, y abriendo los ojos como platos pudo contemplar también la marca de los elegidos.-Enhorabuena, señor Lacyl, ha tenido una niña...una niña con la Marca. Sin embargo, la señora Lacyl ha...

-¡Apartaos mujer!-Explamó al oír las palabras de la matrona, apartándola inmediatamente y cogiendo a su hija. -Por fin abandonaremos está miserable vida, gracias a esta niña, la muerte de tu madre no ha sido en vano, eres merecedora pues, de su nombre, Maná.

Es bien sabido, que un niño, aún siendo Lacan, los servidores de los magos, si nace con la marca, es ascendido de categoría, y con él, toda su familia. La marca era conocida como una auténtica bendición, bendición que había sido otorgada a la familia Lacyl, aunque no todo es un camino de rosas, pues el entrenamiento y aprendizaje de estos niños, es duro y a menudo cruel...

Así pues, Brann Lacyl, despidió a la matrona, cubrió el cuerpo de su antigua esposa con la sábana de su camastro y salió de su casa con Maná en sus brazos. Con una sonrisa que rozaba la locura, prendió fuego a su casa, borrando su pasado como lacan, y ya puestos, ofreciendo sepultura a su "amada".

No tardó mucho en llegar hasta las puertas de la casa noble a la que servía, los Soebe. Una familia de magos mediocres, cuya única unión con la magia era el hijo mayor de la familia, Orsul Soebe. Tocó las puertas con fuerza, y al ser abiertas, alzó su llorosa hija ante el mayordomo, gritando con fuerza:
-¡Proclamo mi libertad y admisión en la familia Soebe, por la marca sagrada que ha sido concedida a mi hija, Maná Lacyl, ahora Maná Soebe!

Todo lacan que tenga la marca será admitido rápidamente dentro de la familia noble a la que servía, incluído sus padres y hermanos, formando parte entonces del clan de magos familiar. Y así fue lo que ocurrió con los Laryl, desapareciendo rápidamente de la historia, para formar parte de la historia de los Soebe, una historia turbia a partir de la adquisición de los dos nuevos miembros...

------------------------------------------------------------------------------------------------


Sin duda que los magi no dejan de sorprenderme, sobretodo esas extrañas costumbres de castas que poseen. ¿Qué ocurrirá con esa niña Maná? Hum, me preguntó por qué me suena tanto ese nombre...